Amparo Sánchez, el viento que baila y que canta

Por M. Emilia Sganga

Ha visitado Argentina en septiembre del año pasado, trajo con ella a su banda “Amparanoia” y nos ha hecho bailar sin parar. Amparo Sánchez es de esas artistas a las que uno no puede imaginarse sin una sonrisa en la cara. Ha creado su propio lenguaje, es que cuando uno la ve meneando su pollera, sabe que desde su boca no saldrá otra cosa más que luz. La fuerza y energía que brotan en el escenario lo dejan a uno con ganas de más, siempre. Amparanoia ha cambiado mucho en estos años, varios músicos han pasado y otros tantos se han quedado. Desde 1997 este proyecto ha ido caminando por el mundo y ha ido dejando huellas, las giras y los discos logran plasmar una especie de filosofía nómade que ha quedado grabada en cada una de las canciones y en cada uno de los lugares por los que ha pasado. Con bases de reggae, son, rumba, flamenco y una pizca de música balcánica, esta banda hace suyo el mestizaje sonoro. Podemos caer en el detalle de las distintas nacionalidades de los más de veinte músicos que han girado por el grupo, y sin embargo, no sería la solución para hablar de mestizaje musical. Es que en Amparanoia, las naciones, los estados, los países se desvanecen, solo escuchando sus canciones uno logra cerrar el sentido de la mezcla.
Desde mediados del año pasado la banda comenzó su gira de despedida “Bye Bye Tour”, presentando en ella también su último disco “Seguiré Caminando”.
Es el título de este último trabajo el que nos marca la existencia de un camino recorrido en sus discos, las particularidades de cada uno permiten echar luz a un conjunto de sensaciones. Primero vino “El poder de Machín” (1997), un trabajo poderoso, y en donde queda bastante clara la carta de presentación de la banda. El primer tema de este CD “Hacer dinero” aparecerá más tarde realizado junto a Ojos de Brujo.
Un año más tarde aparece “Feria Furiosa”, un disco que hace bailar y donde las mezclas están al alcance del cuerpo, es una feria de variados sonidos con una fuerza única. Aquí colaboraron Manu Chao, Tonino Carotone, Juanlu (de Ojos de Brujo), entre otros invitados. Es luego de la presentación de este trabajo cuando varios de los músicos deciden hacerse a un costado de Amparanoia. Amparo Sánchez continúa con el proyecto, rearmando el equipo con el que seguirá. En este período sacan el EP “Llámame mañana”.
Será luego de un viaje a México y de un período de convivencia junto al Movimiento Zapatista donde comienza a tomar forma “Somos Viento”. Este disco es una descripción de las grandes obsesiones y enfermedades actuales que ponen un velo a cualquier forma de existencia diferente, pero siempre con el toque de Amparanoia, donde el baile y la fiesta son parte de la rebelión, o la rebelión misma.
El cuarto trabajo del grupo fue“Enchilao” (2003), en él aparecen sonidos algo nostálgicos, violines, susurros, una versión de “Dos gardenias” y letras que cuentan y describen sensaciones. Después vendrá “Rebeldía con Alegría” un disco con una selección de canciones de trabajos anteriores. En el 2006 publican “La vida te da”, comenzando con una rumba, para luego estallar con toques de reggae, ska, bolero, y son.
Llegó el momento de la despedida en el 2008, es así que preparan su última gira “Bye Bye Tour” como una especie de “hasta luego”. Hoy la llamita de Amparanoia se va apagando. Por lo pronto Amparo Sánchez ya comenzó a trabajar en un nuevo proyecto: “Tucson-Habana”, y mientras tanto seguirá dejando huellas a las que habrá que seguir con atención para no perderse la alegría que va creando.