Por Mario Efron
Algunos instrumentos se vuelven tan populares con el tiempo que su origen, en muchos casos, deja de importarnos o lo olvidamos. Creo que este es el caso del djembe o yembé, un instrumento que se ha incorporado de forma masiva al set de muchos percusionistas, de tal forma que hoy en día, podemos escuchar al djembé en un conjunto de música africana pero también en uno de folclore argentino o música brasilera, por nombrar sólo algunos ejemplos.
El djembé se trata de un membranófono perteneciente al grupo de los tambores de copa. Estos instrumentos llevan este nombre porque su forma es similar a la de una copa. La circunferencia mayor, de alrededor de treinta centímetros de diámetro, es la que lleva el parche, mientras que la otra queda abierta.
Tradicionalmente su cuerpo es de madera pero actualmente, podemos encontrar ejemplares de fibra de vidrio, pasta de aserrín u otros materiales. Para fabricar el parche se utiliza cuero de cabra. La afinación del instrumento depende de su tamaño y de la tensión del parche lo cual es un proceso muy laborioso.
Básicamente existen dos formas de tensar el cuero de un djembe: una tradicional y una moderna.
La forma tradicional es por medio de una serie de tensores de soga que se entrelazan formando un tejido que va desde un aro metálico, al cual está unido el parche, hasta otro aro que se coloca aproximadamente en la mitad del instrumento, justo donde comienza la parte más angosta de la copa.
La forma moderna de tensarlo es por medio de herrajes metálicos adosados al cuerpo de madera y que, por medio de una llave, permiten modificar la tensión del parche. Este sistema es muy efectivo en lugares como Buenos Aires donde el clima es muy húmedo.
El djembé se toca con las manos y es posible encontrar en él una interesante variedad de sonidos que dependen, básicamente, del lugar del parche donde lo percutamos. Si lo hacemos en el centro obtendremos un sonido grave y a medida que nos aproximemos al borde de la circunferencia, el sonido será más agudo. También existen variantes tímbricas que se consiguen percutiendo el parche con distintas posiciones de la mano, está técnica merece una columna aparte y un percusionista que nos lo explique, lo dejo pendiente para próximas columnas. Mientras tanto los invito a ver y escuchar a Mamady Keita, un percusionista nacido en Guinea y referente a nivel mundial del djembe.
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