La
ayahuasca, yagé, caapi, yagugue, mariri o pildé, que en quechua significa “soga
de muerto” es el nombre de popular étnico que recibe la Banisteriopsis caapi,
una liana de la familia de las malpiguiáceas, la que forma parte o en algunos
casos, es la protagonsita, de un conjunto de bebidas enteogénicas consumidas
durante los principales ritos de iniciación y curación del mismo nombre
Ayahuasca, con un origen milenario, entre las culturas del Amazonia de
Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador y Brasil, siendo el grupo étnico de los
Shipibo Conibo del Perú uno de los más importantes representantes de su uso y
práctica en ceremonias y ritos.
Si bien la
liana sería el componente básico de los cocimientos de ayahuasca, también se le
agrega a estos brevajes otros componentes vegetales, diversificando de esta
forma las ayahuascas y el efecto u objetivo buscado ya sea ritual, ceremonial o
curativo.
La
preparación varía según los grupos indígenas, las poblaciones y los médicos
chamanes de cada población, guardando cada uno su secreto y habiendo diversas
recetas con diferentes agregados.
La introducción al ritual del Ayahuasca, exige para los chamanes
e iniciados, una dieta alimenticia con varias restricciones o abundancias según
sean los alimentos.
Los alimentos ricos en triptófano por un lado serán muy
acepatados y consumidos en cantidad. El triptófano es un aminoácido esencial en
la nutrición humana que sólo se obtiene a través de la alimentación. Es
esencial para promover la liberación del neurotransmisor serotonina,
involucrado en la regulación del sueño y el placer. La ansiedad, el insomnio y
el estrés se equilibran gracias al triptófano.
Abunda el
triptofano en los huevos, la leche, los cereales integrales, el chocolate, la
avena, los dátiles, las semillas de sésamo, los garbanzos, las semillas de
girasol, las semillas de calabaza, el maní, la banana, la calabaza y la espirulina. Las personas
que no ingieren estos alimentos tienen mayor riesgo de deficiencia de
triptófano y estarían sometidas a altos niveles de estrés. Para un buena
absorsión metabólico del triptófano se requieren altas dosis de vitamina B6 y
de magnesio.
Lo que se busca y no de forma consciente con esta ingesta,
es que el iniciado o el chamán durante la ceremonia del Ayahuasca, se encuentre
relajado y abierto mental y espiritualmente para que su cuerpo se libere del
espiritu y se haga una limpia correcta para que este absorva las buenas
energias y la sabiduría correspondiente. Así mismo y por otro lado, se prohiben
los alimentos ricos en tiramina, que pueden inducir a crisis hipertensivas si
se ingieren con algunos inhibidores de monoamino oxidasa que se encuentran en
los brebajes del Ayahuasca. La Tiramina es una monoamina que actua en el cuerpo
humano como un vaso-activo. Se encuentra presente de forma natural en algunos
alimentos fermentados como puede ser el queso, las nueces, el hígado de pollo,
el arenques y por extensión a todos aquellos perteneciente a la familia de la
sardina. Los alimentos que contienen tiramina pueden producir dolores fuerte de
cabeza como la Migraña.
Un dolor de
cabeza, una tensión durante la ceremonia, dispersaría al iniciado de lo que se
busca, del trabajo con el espiritu y lo mental.
Todas las
ceremonias de ayahuasca, se realizan en la noche y pueden durar hasta 4 horas.
Durante la ceremonia y después de beber la ayahuasca, se conduce a los
presentes mediante canciones y rituales que ayudan en la travesía cuerpo - mente. La ayahuasca en algunos casas puede
producir vómitos, diarreas, sudoraciones y otros efectos. Sin embargo, este
proceso es relativo. Algunos países reconocen este proceso como Purga, e incluso,
hoy se ve esta práctica como herramienta de gran utilidad para diversos
problemas, en especial los tratamientos de desintoxicación y adicciones, de
hecho en algunos países como Brasil y Perú configurándose como uno de los
tratamientos más punteros para las drogodependencias.
Los médicos
indígenas tradicionales cuidan esta planta con la que establecen una relación
de simbiosis, en donde el beneficio del ser humano es la conciencia y el
conocimiento de la selva, cuyo espíritu lo sanará.
Justamente
en la Semana de la Tierra, podemos decir que el rol del Chamán como principal
maestro de simbolismo tribal, tiene un papel principal en esta gestión
ecológica, restringiendo activamente la caza y la pesca. El chamán ayuda al
equilibrio entre las necesidades humanas y los recursos fácilmente agotables del planeta,
obviamente, su rol fundamental radica en el área donde se desarrollan sus
actividades, en el marco de su comunidad.
Siguiendo
la tradición del Ayahuasca y desde donde podamos, generar ese trance tan
particular, les dejo una deliciosa sopa con muchos de los ingredientes que si
se pueden consumir antes de la ceremonia del Ayahuasca. Espero que les guste y
que luego nos cuenten, cuando regresen, de su divina experiencia.
Nos vemos
en la próxima y yo sigo por acá.... rumbo a mi trance musical.
Sopa de la Esencia Ayahuasca
1/2 cebolla
2 dientes de ajo
1 cdta de chile rojo picadito
½ cdta de canela en polvo
Sal fina a gusto
1 cdta de azúcar morena
100 gr de maní tostado sin sal y sin piel
1 cubito de caldo de pollo o verduras
½ tz de crema de leche
11/2 tz de agua tibia
2 cdtas de maizena
Ante todo, quemar el ajo y la cebolla enteros a fuego
directo en la hornalla y luego.
Introducir todos los ingredientes en la licuadora y licuar
muy bien hasta obtener consistencia de sopa.
Volcar esta sopa en una ollita con algo de aceite para
evitar que se pegue al fondo y sin dejar de revolver, cocinar hasta que se
torne semi espesa.
Servir en un tazón bien lindo y espolvorearle por encima
maní picado y cilantro o perejil a gusto.
Si se desea y se tolera, un poquito de salsa Tabasco viene
bien y relaja, aunque parezca lo contrario.
Acompañar con un rico té de Tilo y jugo de pomelo bien frío
y listo. Delicioso.
Yilan
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