Por Hernán Navarro
Es difícil hablar de la cocina nigeriana como un todo, debido a que –como es habitual en las naciones africanas- al ser un país con distintas situaciones geográficas, variedad cultural y con muchas complicaciones económicas y de transporte, en cada región y en cada grupo étnico se alimentan de formas muy diversas.
Simplificando ampliamente esta diversidad gastronómica, tal vez se pueda dividir el país en norte y sur, sin dejar de lado la región central, donde las mesetas y las cadenas montañosas cumplen su papel, tanto el mar del suroeste como el lago Chad al noreste que, ubicado más al centro del país, corta con una zona cuasi desértica donde solo hay asentamientos petroleros.
La extensa sabana, a su vez, hace su parte con animales de caza, aunque debido al considerable asentamiento humano (Nigeria es el país más poblado del continente) hizo que mermara sensiblemente la cantidad de mamíferos, y algunas floras fundamentales para el desarrollo económico y gastronómico de la sociedad nigeriana. Por ejemplo, la producción de aceite de palma, de notable importancia en la alimentación africana en general, se lleva a cabo gracias a la buena cantidad de palmerales.
El golfo de Guinea, tanto como el de Benín y Bonny, ayudan a la –principalmente de cultura yoruba- población asentada al suroeste con el aporte de mariscos y pescados. Tal es la importancia de esta aguas, que la capital de Nigeria es Abuja pero la ciudad con mayor densidad poblacional es Lagos, que linda con el océano Atlántico.
En el norte existen algunos animales de cría y pastoreo como el cordero, el cebú y la cabra, aunque queda claro que pocos nigerianos tienen la oportunidad de comer al menos un bocado de estas carnes.
Uno de los vegetales particulares de Nigeria es la celosía o flor de terciopelo, que suele conseguirse en otras regiones de clima tropical. En este país africano se la conoce como soko yokoto que significa algo así como haz a tu marido gordo y feliz.
El ñame es otro producto característico de África, cuyos habitantes trajeron para América durante la esclavitud y se consume mucho en países rodeados por el mar Caribe, aunque no se produce a nivel comercial debido a que puede alcanzar un metro de longitud y su parte más ancha siempre queda debajo de la tierra, lo que dificulta muchísimo su cultivo a gran escala.
Un fruto que suele utilizarse mucho es el plátano, con el que se elabora, entre otras cosas, el ukwaka, un pastel a base de cereales. A su vez, las mujeres suelen preparar a diario la cerveza, con la fermentación de este mismo producto. Este elixir se produce con bastante frecuencia debido que al no tener ningún conservante, la bebida suele echarse a perder con facilidad.
Las sopas son los platos más tradicionales, donde se hierve prácticamente todo lo que hay, aunque no siempre son, sobre todo en consistencia, como suele acostumbrarse en los países occidentales. El plato más popular es el egussi, que se elabora con semillas de melón y pescado, principalmente.
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