Instrumentos Clandestinos (El siku)

Por Mario Efron

Cuando hablamos del siku sin duda estamos hablando de uno de los instrumentos más representativos del altiplano peruano. Presente hace miles de años en la zona inclusive mucho antes de la creación del imperio Inca. Se han encontrado ejemplares pertenecientes a la cultura Nazca de más de 2000 años de antigüedad hechos de cerámica.

El siku está formado por dos amarros de cañas, existen muchos tipos de siku, el más común es el de 6 y 7 tubos en cada amarro. Las notas en el siku están repartidas entre estas dos hileras por lo tanto para formar una escala tenemos que intercalar notas de cada una. Esto es muy simple cuando una sola persona toca las dos hileras, pero en el mundo andino existe una técnica muy antigua que consiste en separar los dos amarros de tal forma que son necesarias dos personas para completar la escala y formar las melodías. Esto sin duda tiene que ver con la forma en que el hombre andino concibe la música, no como un hecho solitario sino como parte de su actividad comunitaria.

La hilera de 6 tubos suele llamarse “6”, segunda o ira que en lengua aymara quiere decir “el que conduce”. Se me ocurre que ese nombre se debe a que en este amarro están las tónicas del instrumento, tanto si tocamos en un tono mayor o uno menor, por lo cual en general las melodías las comienza el músico que toca el siku ira. La hilera de siete tubos suele llamarse “7”, primera o arca que podríamos traducir como “la que sigue”.

El siku se fabrica con una caña llamada chuqui o ch’alla, es una caña de paredes muy finas que se da en regiones tropicales. La afinación en el siku está dada por el largo de los tubos, cuánto más largo, mas grave es la nota que produce y cuánto más corto más aguda. Los Luthiers suelen tener una vara con marcas que indican el largo correspondiente a cada nota, marcan la caña y luego la cortan haciéndola girar con la mano y apoyando sobre ella un cuchillo muy filoso. Luego van retocando la afinación cortando pequeñas rodajas de caña. Otro método de afinación, no tan tradicional, es por medio de tapones de goma que remplazan el nudo natural de la caña. En ese caso tendremos que meter el tapón dentro y moverlo hacia arriba o abajo hasta que nos dé la nota que buscamos.


Al conjunto de personas que toca siku se los llama banda de sikuris, suelen ser agrupaciones de entre 10 y 50 personas en donde algunos músicos a parte de siku tocan un bombo de gran tamaño que llevan colgado del hombro. Los sikus que se usan para tocar en banda tienen en la parte de adelante otra hilera de cañas pegada a la principal que no está tapada y cumple la función de resonador, en algunos casos esta segunda hilera puede estar afinada una octava más arriba de la principal aportando, aparte de resonancia, una gran cantidad de armónicos.

La región de Puno se encuentra a orillas del lago Titicaca, y cuenta con una gran actividad sikuri. Para la fiesta de la Virgen de la Candelaria, el 2 de febrero, decenas de bandas salen por las calles de Puno. Son agrupaciones muy grandes de alrededor de 50 músicos que tocan melodías representativas de las distintas regiones del departamento. Estas regiones no solo se diferencian por sus vestimentas sino por la forma de tocar el siku, por ejemplo los sikuris de la Isla de Taquile tocan melodías rápidas usando sikus de distintas medidas que octavan la melodía principal. Los ayarachis de Paratía tocan ritmos fúnebres, los sikuris de Moho tocan un estilo más ligado armonizando las melodías con sikus de distintos tamaños que forman quintas y terceras paralelas. Estos son solo algunos ejemplos de una expresión cultural muy diversa que se da en Puno considerada la “capital del folclore peruano”.



No hay comentarios: